Se llama feminismo

Pensaba reservar esta entrada para el 8 de Marzo, pero en realidad no me gusta que me impongan las fechas señaladas y considero necesario el feminismo los 365 días del año, así que he decidido adelantarlo y ya de paso aprovecho para contestar a Toni Cantó y demás personas también machistas a diario.

Aunque pretenda ser piropo

dulce, delicada y preciosa

forman parte del machismo bobo

y de la sumisión forzosa.

No está en manos del varón

y hará ella lo que quiera hacer,

no requiere halagos ni aprobación

ni es objeto, ni sólo madre o esposa: 

es mujer.

Siglos de explotación no bastan

en la cultura, oriental y occidental,

para ver que a la mujer se aplasta,

y que el machismo existe, es aún real.

No hace falta irse muy lejos,

ni a Colombia ni al Islam.

El machismo son control y celos,

princesas Disney, su lenguaje,

 y la publicidad.

Hay opresión silenciosa e invisible.

No sale en la tele ni tampoco en las revistas,

en el siglo XXI, es increíble,

ella hace los cuidados: al hombre, al hijo y al capitalista.

Y tengo que hablar de Toni Cantó

y de su partido aunque lo dirija una mujer.

No basta con pedir perdón,

viene en su programa: el machismo de UPyD.

Porque hablan de neutralidad

tratando por igual a víctima y verdugo,

así no consiguen justicia o igualdad,

sino apoyar a quien oprime, los tarugos.

Del machismo la víctima es mujer,

como la clase obrera es víctima del capital.

Por eso, esta lucha es suya, así ha de ser,

el hombre sólo debe escucharla e ir detrás.

Hay opresor y oprimida de verdad,

no hablamos de lucha contra el sexismo.

Si nos referimos a género e igualdad,

esta lucha sólo tiene un nombre:

se llama feminismo.

Y tras escribir esta entrada me acuerdo de todas las mujeres que luchan a diario contra la lacra del machismo, pero muy especialmente tres de ellas por diversos motivos: Kris que desde que la conocí allá en un curso de monitores y monitoras me ha hecho reflexionar con sus palabras y su forma de actuar, Olivia con quien empecé a hablar más cuando pensaba que ya lo sabía todo y me enseñó que no sabía nada, y mi madre que ha sido quien más me ha educado, no tanto en la teoría, pero sí en la práctica.