Sin embargo, muchas personas no saldrán, igual que muchísimas si que lo harán. Pero me centro en las que no. ¿Qué razones tienen? Una es que les descuentan el día... ¿saben que las bajadas del salario, las reducciones en las indemnizaciones por despido o las eliminaciones de la paga de navidad, así como el aumento de la edad de jubilación, suponen pérdidas mucho mayores de dinero? Es una razón demasiado simple y de escaso nivel de razonamiento como para no hacer una huelga, la verdad. Sin embargo, esta y otras razones toman sentido por la razón que yo considero principal y esencial, y que mueve a todas las demás.
Esta razón es "que la huelga no va a servir de nada". Y tienen razón, si no se apoya masivamente la huelga por la mayoría, si no la ejercemos, y si no participamos de piquetes y movilizaciones para garantizar que todo el mundo tenga el derecho a ejercerla, la huelga no va a servir de nada. Sin embargo, ¿qué pasará si la mayoría secundamos la huelga? La historia habla de que todas las conquistas sociales e individuales de los y las trabajadoras se han logrado gracias a la lucha, y las huelgas han sido una de las mayores armas de la lucha de la clase trabajadora. La culpa de que una huelga no sirva de nada, no la tienen quienes la hacen, sino quienes no la hacen.
Y es que es mentira que hayamos vivido por encima de nuestras posibilidades o que no haya alternativa. Los datos están ahí y son simples, tanto como que dos más dos son cuatro. El PIB español son 1.072.212 millones de euros. Es decir, este es el valor monetario del conjunto de bienes y servicios producidos en España por los trabajadores y trabajadoras. En España hay 23.098.400 trabajadores y trabajadoras sumando empleados, autónomos y desempleados (no se incluyen las personas que trabajan y son necesarias para la producción sin cobrar por ello, como las amas de casa). Pero aún teniendo en cuenta que sólo estos produzcan, tendrían derecho a una media de 46.000 € anuales. Sin embargo, el salario medio son unos 22.000 € al mes, de quienes tienen el lujo de cobrar, porque la media bajaría si se incluyera en este cálculo los que no cobran, los trabajadores desempleados y desempleadas. Es decir, los y las trabajadoras que tienen el "privilegio" de recibir un salario, reciben menos de la mitad de lo que producimos. ¿Quién se queda el resto? Se lo quedan los grandes empresarios, la banca y la patronal, ya sean de aquí o de otros países, que son los verdaderos causantes de la crisis debido a su especulación financiera, y que integran o controlan a su vez el BCE, el FMI la OMC, los diversos gobiernos en España, Europa y el mundo, salvo raras excepciones, o los medios de comunicación de masas, y resulta que son todos estos organismos y entidades de su propiedad quienes nos dicen que no hay alternativa que jodernos sin protestar y dejarles hacer a ellos para que mantengan sus ganancias y podamos obtener las sobras, y a su vez quienes nos dicen que la huelga no sirve de nada.
No les sirve a ellos, y sí que hay alternativa, quitarles lo que ellos ganan, quitarles lo que en realidad debería ser nuestro. Propongo que probemos a ver si la huelga sirve, que lo intentemos con todas nuestras fuerzas, y que si ni aún así somos capaces de poner en jaque a este sistema asesino y genocida, si salimos la inmensa mayoría y en verdad resulta que no sirve de nada, entonces será el momento de emplear otros métodos, porque nos habrán obligado a ello, para que la democracia se imponga a la dictadura del capital y los mercados.
El 14N, ni curro
ni clase, ni consumo
Trabajadores y trabajadoras
¡a la huelga general!
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